Su historia


Desde 1870, la explotación de sal en Fuente de Piedra ha atravesado varias etapas. Inicialmente, la reina regente otorgó a Guillermo Partington y José Joaquín Figueras el derecho de aprovechamiento de la sal durante la desecación de la laguna. Más tarde, en 1880, una nueva compañía, la Sociedad Agrícola y Salinera de Fuente de Piedra, tomó el relevo, con el marqués de Fuente de Piedra como presidente y Juan Manuel Delgado como director y accionista principal.

En 1885 se construyó la Fábrica de Abonos, que en 1886 fue conectada a la estación de ferrocarril para facilitar la distribución y el suministro. La empresa continuó operando bajo diferentes administraciones. Desde 1930, José García Berdoy mantuvo la producción durante 21 años. Sin embargo, en 1951, la actividad cesó al dejar de ser rentable la explotación de la laguna.

Fotografía por Rafa García

La fábrica de abonos está actualmente en estado de abandono, aunque aún se conservan sus muros y uno de los edificios principales en condiciones aceptables. La chimenea sufrió un desplome parcial que fue reparado, añadiéndosele una nueva estructura en su parte superior. Actualmente el acceso al interior está prohibido por riesgo de derrumbe, aunque se puede observar casi todo el complejo desde el exterior de la finca.

Extracción


Las materias primas extraídas de la laguna, como la sal y el fertilizante, se procesaban de manera similar.

La sal de la capa superior se recogía y molía en la fábrica, mientras que el fertilizante, ubicado en las capas inferiores, se extraía manualmente y se transportaba en cubos cerrados para evitar la pérdida de nitrato.

Posteriormente, ambos productos eran secados, desmenuzados y sometidos a diversos procesos para su preparación final.

Fotografía por Rafa García